SANDÍA
La sandía contiene una gran variedad de carotenoides, son antioxidantes. Uno de los muchos roles de los antioxidantes es proteger las células de los radicales libres, que están vinculados con enfermedades graves, como el cáncer y las enfermedades cardíacas.
Gran contenido en agua, luego nos va a hidratar en la época de calor y vitaminas como el betacaroteno y la vitamina A que protegen la piel del sol y reparan sus células.
Además de consumirla a trozos, podemos hacer granizado de sandía, incorporarla en alguna ensalada con pepino, queso feta, cebolla morada y menta fresca.
MELOCOTÓN
Gran contenido en agua, más del 805% así que es un alimento que evita la deshidratación.
Fuente de betacaroteno, antioxidante que además contribuye a la salud del sistema inmunológico.
Por su aporte de fibra, potasio y vitamina C es una fruta que ayuda a mantener el corazón sano. El equilibrio entre los niveles de sodio y potasio es la clave principal para regular la presión arterial y reducir el riesgo cardiovascular.
Normalmente se consume solo, pero os invito a probarlo incorporándolo a un tartar de atún en lugar del aguacate o con él.
PIMIENTO VERDE
Es un alimento rico en fibra, así que resultará saciante. Beneficioso para nuestra salud ocular y cardiaca porque es rico en luteína. Alto contenido en hierro y vitamina C, que ayuda al organismo a absorber mejor el mineral.
Lo podemos utilizar de múltiples maneras, en sofritos y guisos hacerlos rellenos, incorporarlo crudo en ensaladas, utilizarlo de guarnición de carnes y pescados, en tortilla, hacer mermelada para luego utilizarla con alguna carne.